El Black Friday de 2023 fue un éxito para los minoristas, con un aumento del 8% en las ventas. Sin embargo, este día también tuvo un impacto negativo significativo en el medio ambiente, ya que los productos populares de la temporada, como ropa, electrónicos y alimentos, generalmente vienen envueltos en plástico de un solo uso.
A pesar de afirmaciones de reciclabilidad, más del 90% de los desechos plásticos globales nunca se reciclan, contribuyendo a la contaminación en ríos, océanos y el medio ambiente en general. El plástico de un solo uso, a pesar de sus peligros, sigue siendo la opción preferida debido a su bajo costo y disponibilidad.
Aunque se ve al papel como una alternativa, también tiene desventajas, como la deforestación y el alto consumo de energía. La solución emergente es el plástico compostable, que ofrece los beneficios del plástico tradicional sin el impacto ambiental. Este tipo de plástico, compuesto por polímeros compostables y biobasados, se descompone en materiales orgánicos, generando compost agrícola valioso.
La creciente demanda de plástico compostable, considerado por muchos como la mejor forma de embalaje sostenible, podría ayudar a frenar la contaminación plástica y mitigar los efectos del cambio climático al fomentar la producción y el uso de compost. A pesar de la complejidad de la crisis de contaminación plástica, las empresas comprometidas con la sostenibilidad y la demanda del consumidor deberían considerar el plástico compostable como una solución más amigable con el planeta.