Cada año se producen alrededor de 160 millones de tarjetas de pago, y se reemplazan cada tres o cuatro años, lo que equivale a 5,7 millones de toneladas de plástico aproximadamente.
Tred es una compañía financiera que está recaudando fondos para producir tarjetas fabricadas con plástico reciclado. Adicionalmente las tarjetas también se emparejarían con una aplicación para rastrear la producción de carbono de los usuarios en función de sus gastos, lo que ayuda a que comprendan cómo algunos gastos afectan el medio ambiente. La aplicación muestra gráficos que reflejan como las acciones de los usuarios ayudan o dañan el planeta.
Para acceder a la app se requiere una suscripción mensual y cada pago compensa su producción de carbono a través de una iniciativa certificada de plantación de árboles escocesa. Los usuarios con la menor huella de carbono son recompensados plantando árboles adicionales en su nombre.
Algunas compañías de grandes tarjetas, como MasterCard, están mostrando interés en liberarse de plástico. La mayoría de las tarjetas de pago hoy en día están hechas de plástico de PVC, que no es biodegradable y solo se convierte en microplástico después de décadas. MasterCard anunció que está lanzando tarjetas ecológicas que estarán hechas de plástico oceánico biodegradable, reciclado o recuperado.
Más de 60 instituciones financieras se han asociado con MasterCard y Green Payments Partnership para ofrecer tarjetas sostenibles a los clientes, incluidos Santander, Crédit Agricole y DBS Bank. Además, Visa anunció la tarjeta de alto contenido Earthwise, que se fabricará casi en su totalidad con plástico reciclado.
Fuente: Los plásticos reciclados podrían ser su nueva tarjeta de crédito.