Comemos y bebemos hasta 5 gramos de microplásticos, según estudio

Según el estudio “Desperdiciar o no desperdiciar: cuestionar los riesgos para la salud de los microplásticos y nanoplásticos con un enfoque en la ingestión y la carcinogenicidad”, realizado por la Universidad de Medicina de Viena (MedUni), comemos y bebemos microplásticos hasta en un total de 5 gramos por semana, lo que es equivalente al peso de una tarjeta de crédito.

El plástico se descompone hasta quedar reducido a piezas milimétricas que entran en la cadena alimentaria y, al final, terminan en nuestro cuerpo. Estas partículas que entran en el tracto gastrointestinal a través de la comida y bebida consisten en micro y nanoplásticos, que suponen especialmente un riesgo para la salud de las personas con enfermedades crónicas, como la diabetes, la obesidad o la hepatitis.

El estudio señala que un intestino sano es capaz de hacer frente a este riesgo, mientras que las personas con enfermedades crónicas son susceptibles a los efectos nocivos de estos plásticos. Ingerirlos podría activar mecanismos implicados en las respuestas inflamatorias e inmunitarias e, incluso, podría estar detrás de la aparición del cáncer, porque los nanoplásticos están asociados con procesos bioquímicos que están involucrados de manera crucial en el proceso por el cual las células normales se transforman en células cancerígenas

Los investigadores sostienen que al beber de 1,5 a 2 litros de agua al día de botellas de plástico se ingieren unas 90.000 nanopartículas de ese material al año, mientras que al hacerlo del agua del grifo esta cifra disminuye a 40.000.

“El ser humano ha introducido una cantidad masiva de plástico en los entornos atmosférico, terrestre y acuático, lo que hace que los desechos plásticos sean tan ubicuos. Por ello, se necesita con urgencia una investigación más detallada sobre cómo estos plásticos afectan al cuerpo humano”

Fuente: El Universo