El reciclaje químico ha ganado cada vez más atención como una tecnología de recuperación prometedora, especialmente para los residuos plásticos post-consumo. Se ve como una solución complementaria al reciclaje mecánico, siendo más adecuado para plásticos difíciles de reciclar como soluciones multicapa o plásticos altamente contaminados.
Este método de reciclaje comprende diferentes tecnologías que convierten los residuos plásticos en una materia prima aguas arriba, lo que resulta en materias primas secundarias que tienen la misma calidad que los materiales vírgenes. Estas tecnologías de recuperación brindan una oportunidad para los residuos plásticos que generalmente no se reciclan mecánicamente. De esta manera, los residuos se dirigen lejos del vertedero.
El reciclaje químico también es una opción para el plástico de base biológica. La investigación también ha demostrado que el reciclaje químico se puede utilizar para separar el PLA (ácido poliláctico) y el PET (politereftalato de etileno), lo que permite mantener el contenido renovable aún más tiempo, requiriendo no solo menos recursos fósiles, sino también menos materia prima renovable para producir nuevos plásticos de base biológica de alta calidad.
En los últimos años, el interés en el reciclaje químico en Europa ha crecido significativamente. Ahora, diferentes actores, incluyendo startups, universidades y empresas, están trabajando en el desarrollo de estas nuevas tecnologías. Aunque muy pocas empresas en Europa alcanzaron la escala comercial ya que se necesitan grandes inversiones en nuevas plantas y grandes cantidades de residuos plásticos adecuados para este proceso de reciclaje.
Sin embargo, con la previsión de que la demanda de plásticos reciclados aumente en los próximos años, el reciclaje químico puede ser una opción válida para los flujos de residuos post-consumo en el futuro. Sobre todo porque el reciclaje mecánico a menudo tiene dificultades para alcanzar las cualidades requeridas.
Fuente: Reciclaje quimico